lunes, septiembre 15, 2008

Tres eran tres

Me han contado una anécdota de una niña pizpireta. Y como la escuché, os la cuento... Viene a resultar que en una clase de religión para niños pequeños el sacerdote les estaba dando unas pinceladas sobre la Santísima Trinidad. Ya sabéis, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Y les comentó aquello de que "el Hijo era el Verbo". Y el buen hombre no tuvo en cuenta que un chiquilín es impredecible...

Cuando se quiso dar cuenta, alzose una manita y una voz angelical expuso en son de triunfo:
¡Así que el Padre es el sujeto y el Espíritu Santo el predicado!.

2 comentarios:

Ana María dijo...

Me gusta más esta explicación que la que dan ellos :).

Mar dijo...

somos más listassss....